La nueva cirugía de nariz es la rinoplastia de las 4 Rs:
Remodelar, Retener, Reposicionar y Reforzar
Estas técnicas estructurales, aunque técnicamente más exigentes que aquellas basadas en la reducción cartilaginosa y ósea, tienen como primer objetivo la preservación del soporte o andamiaje del marco óseo y cartilaginoso de la nariz para poder evitar las complicaciones derivadas de la eliminación sistemática de estos tejidos. Por lo tanto, más que hablar de eliminar o reducir cantidades considerables de cartílago y hueso para quitar “protagonismo” a una nariz grande o malformada, la rinoplastia estructural se basa en el reposicionamiento y en la modificación de la forma de estas estructuras. Este cambio de paradigma nos proporciona un nivel de precisión, replicación de resultados y seguridad a largo plazo en forma y función como no habíamos tenido hasta la fecha. Esto permite que las personas que se someten a una rinoplastia puedan respirar con más facilidad y mejorar el paso del aire y los ronquidos.
El aspecto final de la punta nasal es armónico con el resto de la nariz, elegante pero al mismo tiempo robusto, evitando complicaciones y deformidades por falta de soporte como ocurre con las rinoplastias incisionales clásicas.
El abordaje “abierto” proporciona una mejor y más fisiológica exposición del “chasis” nasal permitiendo la preservación de la vascularización y propiedades de las partes blandas y un mayor control en la utilización de injertos con un resultado más sólido y estético del contorno nasal.
Las nuevas técnicas de rinoseptoplastia estructural combinadas con la utilización de los ultrasonidos para remodelar la parte ósea nos asegura un cambio morfológico más acorde al ideal de nariz y, además, estable y duradero en el tiempo con una función respiratoria incrementada en la mayoría de casos.
Se acabaron las narices hechas en “cadena” y estereotipadas, las deformidades y el aspecto de “nariz operada”.
En la cirugía facial hablar con el paciente será casi tan importante como llevar a cabo la intervención quirúrgica. ¿Qué busca el paciente exactamente? y ¿Qué le puede ofrecer el cirujano plástico?. No existe una dirección común, entre paciente y médico, tan acentuada en prácticamente ningún otro procedimiento.